Los ojos son un elemento crucial y deben incluir las pestañas, que suelen ser más largas y curvadas en las mujeres. Esto ayuda a acentuar la feminidad y a dar una expresión más suave y atractiva. La distancia entre los ojos y las cejas también es importante; las cejas generalmente están más arqueadas y delgadas.
La nariz suele ser más pequeña y delicada, con una punta más redondeada. Los labios son otro punto focal, y deben ser más pronunciados, con el labio superior ligeramente más arqueado que el inferior, formando una suave curva en el centro (el arco de Cupido). Los labios suelen ser más carnosos y bien definidos, lo que contribuye a una apariencia más femenina y sensual.
Las orejas deben ser proporcionadas y bien alineadas con los ojos y la nariz. El cabello también juega un papel importante en el dibujo de la cabeza de una mujer. Debe ser representado con suavidad y fluidez, y puede variar en estilo y longitud según la preferencia artística, pero siempre manteniendo una apariencia elegante y femenina.
Además, es importante considerar los detalles del cuello, que suele ser más delgado y elegante, con una transición suave entre la cabeza y los hombros. Estos elementos combinados ayudarán a crear una representación armoniosa y femenina de la cabeza de una mujer.
